Enero: Suerte para todo el año


podarikoLos griegos son un pueblo supersticioso, eso no se puede negar.

Se puede comprobar en costumbres e incluso en el idioma. No en vano las expresiones «Por suerte» (Ευτυχώς – eftijós) y «por desgracia» (Δυστυχώς – distijós) aparecen en cualquier conversación. Así como achacar al destino los avatares que se nos presenten y concluir con un desesperante y terminante «Qué le vamos a hacer, qué podemos hacer» ( Τι να κάνουμε?-ti na kánume?) . La suerte está echada, nada podemos hacer excepto someternos a sus caprichos.

Por eso es fundamental tener a los hados del destino a nuestro favor. La primera persona que entre en nuestra casa, tienda o negocio a principios de año determinará la buena o mala suerte que nos acompañará el resto del año. Esta tradición se llama Podarikó (procedente de podi, pie) y parece ser que existía entre los antiguos griegos, los romanos y también en el pueblo judío. Se prefería a los niños porque son inocentes y en su corazón no cabe la envidia o la maldad.

Hoy en día sigue siendo importante, y si conocemos alguien especialmente suertudo, o que el año pasado vino a nuestra casa y fue un buen año, se le llama para que nos haga el podarikó y la suerte nos acompañe también este año.

Y atención! si alguien nos invita a su casa por primera vez tenemos que entrar siempre con el pie derecho, con esas cosas no se juega.